miércoles, 25 de junio de 2014

Emoción + nervios = Graduación



El sábado viví uno de los días más importantes de mi vida: mi graduación.

Nervios y emoción me invadían por montón. Tanto esfuerzo ahora tenía su recompensa.
En la época que tenía que amanecerme estudiando y tenía que atender a mi Sebitas fue muy difícil, pero ahora ya estaba a minutos de que abrieran el telón del auditorio y de recibir mi bachiller!
Por suerte estaba en la primera fila (de algo valió ser chata) y todos mis familiares me verían.
Cuando abrieron el telón y presentaron a la promoción, lo primero que hice fue ver el rostro de mi Sebitas... su carita tan tierna y ver a su mami graduarse ;) 
Cada vez que lo veía me tenía que aguantar las lágrimas para no soltar en llanto. Sebitas te diré algo, que espero que algún día lo leas....



Hijo mio, te amo tanto que no lo puedo explicar. El graduarme no sólo fue un triunfo para mí, fue de ambos, porque tú me acompañaste en todo momento. Un ciclo me acompañaste estando aún dentro de mi barriguita, y aunque había gente de la universidad que murmuraba y cuestionaba tu llegada, yo siempre te llevé conmigo con mucho orgullo. Acariciar mi barriga me daba es paz y tranquilidad que necesitaba.

Luego naciste y me acompañaste en mis noches de estudio, te veía dormir como un ángel mientras repasaba mis separatas. 
Gracias por enseñarme a amar sinceramente y cambiar mi vida 360°. Eres el mejor regalo que Dios me mandó. Tu eres lo que me da fuerzas para ser mejor cada día.
Con amor.
Mamita.


Sebastian... mi fuerza!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Blogging tips